Plockton, el pueblo costero más bonito de Escocia

Como ya os contamos en 10 cosas que deberías saber antes de viajar a Escocia hay lugares de lo más pintoresco y auténtico que no salen en las guias y, si lo hacen, quedan eclipsados por otros mucho más turísticos que todos nos empeñamos en visitar.

Es el caso de Plockton, un precioso pueblo de las Highlands escocesas que se asienta a los pies del lago Carron, a pocos kilómetros de la isla de Skye.

El pueblo es muy conocido entre los escoceses y empieza a serlo más ahora entre los turistas. Dispone de una pequeña tienda de comestibles que también sirve cafés, un restaurante, tiendas de artesanía local, varios Bed and Breakfast y algún pub.

La línea de tren que llega a Plockton es la de Kyle of Lochalsh, a las puertas de la misma isla de Skye.

Las casas de Plockton se disponen orientadas hacia la bahía, formando una composición muy bonita a lo largo de su paseo marítimo.

Nos dirigimos a Plockton desde Nostie con el objetivo de disfrutar del pueblo pero, sobre todo, de ver focas en libertad.

La noche anterior habíamos reservado un pequeño crucero en barco con Calum´s Seal Trips, que resultó todo un acierto. Aparcamos al final del pueblo, justo donde Calum tiene su barco, el Sula Mhor.

Sólo se paga si se logran ver focas, pero Calum sabe muy bien dónde localizar los peñascos donde viven estos simpáticos animales, así que pagamos y vimos focas. ¡Vaya si las vimos!

Durante algo más de una hora disfrutamos de un viaje en barco por la bahía, amenizado por las anécdotas de Calum, y pronto llegamos al punto álgido del crucero: focas en libertad.

DÓNDE VER FOCAS EN ESCOCIA

Además pudimos contemplar el castillo de Duncraig, una casa señorial del siglo XIX construida por la familia Matheson. El castillo estuvo abandonado después de haberse usado como hospital. Según nos contó Calum, hoy en día funciona como internado para chicas.

También conocimos el islote en el que se inspiró el escritor escocés J.M. Barrie para crear la fantástica isla de Nunca Jamás, hogar de Peter Pan, el niño que no quería crecer.

Las niñas pudieron coger el timón durante unos minutos y les encantó la experiencia. Tras acabar el crucero nos despedimos del simpático Calum y su agradable ayudante y disfrutamos de un paseo por el pueblo.

Después tomamos un café en la tienda de comestibles y dijimos adiós al magnético Plockton, un pueblo que merece la pena conocer y al que llegan pocos turistas, donde se respira paz y cordialidad.

El pueblo costero más bonito y entrañable de Escocia.

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SITUACIÓN DE PLOCKTON EN EL MAPA:

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